En esta entrada hablaré sobre los Bonsai de flor y fruto, ya que como recientemente he adquirido un Malus Everest, especie que pertenece a ese grupo, he adquirido mucha información, así que la publico por si alguna la necesitarais.
Los Bonsai de flor y fruto son muy apreciados por los aficionados y amantes de este arte, ya que estos poseen unos cambios estacionales en color y apariencia increíbles; nos devuelven así el ritmo natural de la vida. Por eso mismo, los árboles de flor son candidatos excelentes en cualquier colección. Estos demuestran mas espectacularmente la llegada y paso de los ciclos estacionales.
En el cultivo del Bonsai no siempre son útiles la clasificaciones botánicas, y por eso la clasificación que os presento se refiere solamente a aquellos datos útiles para saber qué hacer con ese Bonsai.
Respecto a las características de formación de los brotes de flor, podemos hacer una primera división atendiendo a donde se desarrollan, existiendo dos tipos:
- El primero de ellos es aquel en que los brotes de flor se sitúan en la parte inferior de las ramas, siendo de hoja los de la parte superior. Si queremos una buena floración no pinzaremos las ramas a partir del verano, hasta que los brotes de flor se hayan formado. (Membrillero Enano)
- El segundo tipo solo forma brotes de flor en la punta de las ramas (Azaleas y Rododrendons). Estas especies tienen ya formado los brotes de flor en verano, si cortáramos las ramas, éstas desarrollarían hojas, pero no flores.
En cuanto a la forma de floración, agrupo todos los árboles de flor en 4 tipos principales:
- 1º: Son aquellas especies que florecen en la punta de las ramas crecidas ese mismo año (granado, camelia, aulaga). Si queremos que estas especies florezcan, las dejaremos crecer libremente y podaremos después de la floración. Si por el contrario queremos aumentar su ramificación mediante pinzados continuos, ese año no florecerán.
- 2º: Estas especies florecen solo en leña del año pasado, leña vieja. Pueden brotar con flor por toda la rama (camelias de verano, forsitias o hamamelis), solo en la punta (azaleas, rododendrons, gardenias del cabo o magnolios) o bien solo por los brotes laterales (cerezo, albaricoquero, ciruelo, etcétera)
- 3º: Florecen por los brotes laterales de la base en ramas del año anterior. Pero antes de florecer, crecen un poco las hojas (membrilleros, manzano y perales)
- 4º: Los brotes de flor están ya formados el año anterior, pero crecen desde esos brotes con hojas y luego florecen solo en la punta (jazmines)
CUIDADOS PARA LA FLORACIÓN
En primer lugar, la situación en la que nuestros Bonsai de flor estén colocados influirá mucho en la cantidad de brotes de flor que se formen.
Generalmente, a mayor cantidad de luz, mejor será la formación de brotes de flor. Pero esto no significa que debamos colocar sin más en verano nuestros Bonsai al sol. Tendremos en cuenta que cada variedad, cada especie, necesita de cuidados particulares, y especialmente en verano, cuando los brotes de flor se comienzan a diferenciar.
Como norma general, un poco más de luz de la que tenía en el lugar donde una planta se haya desarrollado bien durante todo el año será el más conveniente en este período. Las especie que florecen en la leña vieja (segundo tipo) necesitarán más sol a final de verano; las que florezcan en leña nueva (primer, tercer y cuarto tipo) lo necesitan a final de primavera.
Tenemos que estar también atentos al riego, aunque en este período necesitan de bastante humedad, y más al estar más expuestos al sol, esto no significa que el sustrato esté permanentemente encharcado.
Cualquier daño en las raíces puede malograr la floración, y es bastante más perjudicial el exceso de agua que su defecto.
Por supuesto, es también importante que atendamos unos mínimos cuidados de fitosanitarios. Utilizaremos insecticidas preventivamente, y abonaremos periódicamente. Respecto al fertilizado, si aumentamos las proporciones de fósforo y potasio, la floración será mejor al siguiente año.
Atendiendo a la poda, si nuestro Bonsai es de una especie que florece solo en las puntas, no la podaremos una vez formados los brotes de flor: eso significa que la poda de ramificación la tendremos que hacer en primavera.
Si es de una especie que brota en la base, podaremos el exceso de crecimiento al final del otoño, cuando se hayan diferenciado claramente los brotes de flor y hoja.
Algunas especies necesitan un poco de frío en invierno; procuraremos no protegerlas demasiado, pero no las dejaremos a la intemperie si baja de 0ºC. Si es una especie tropical, las protegeremos a principio de otoño ya que necesitan bastante calor para mantener los brotes florales.
Una vez en flor, lógicamente querremos que ésta dure lo más posible. Dos simples advertencias:
- No abonéis con nitrógeno, pues este actúa estimulando los brotes de hoja y no de flor.
- Procurad que las flores no se mojen; regad solo el suelo y protegedla bajo el techado los días de lluvia.
Una vez pasada la floración, y si ha habido suerte, nuestro Bonsai estará posiblemente cargado de frutos. Ahora lo aclararemos, un exceso de fruta puede o bien dañar la rama o bien dañar a toda la planta.
A pesar de seguir todos estos consejos, puede que nuestro Bonsai que florezca no de fruto. A grandes rasgos podemos dividir los frutales en aquellos cuyas ramas de fruto son de un año, o aquellos que solo tendrán fruto en ramas de dos años.
En estos últimos, si hemos conseguido hacerlos florecer, pero no fructificar, probablemente lo conseguiremos al año siguiente.
CUIDADOS EN LA FRUCTIFICACIÓN
Si hemos llegado hasta aquí, intentaremos cuidar correctamente nuestro Bonsai cuajado de frutos. Al igual que en nuestra floración, nuestro frutal agradecerá el aire fresco y abundante luminosidad. Pero cuidado con el riego: ahora necesita mucha agua. Si el sustrato se seca demasiado, se caerán los frutos; de modo que estaremos atentos y lo regaremos cuantas veces sea necesario, sin llegar nunca a mantener encharcado el sustrato.
Si durante la floración habíamos dejado de abonar (al menos no utilizábamos nitrógeno), ahora lo necesita. Ya podemos continuar con el programa de abonado normal.
A medida que los frutos vayan engordando debemos aclararlos. Sobre todo en aquellas especies que fructifiquen en el ápice de ramas de ese mismo año.
Si tiene mucho fruto podemos dejarlos en aquellas ramas que no necesitemos que crezcan, y eliminarlo en aquellas que queramos engordar.
Si todo funciona correctamente, en algunas especies podéis disfrutar de la silueta desnuda de finales de otoño con los frutos maduros colgando de las ramas. Sé que es una tentación dejarlos así, pero no deben permanecer demasiado tiempo después de que caigan las hojas o el árbol se debilitará en exceso, no floreciendo adecuadamente el año que viene.
Para muchos frutales siempre que la temperatura se mantenga por encima de 0ºC y por debajo de 8ºC, el lugar perfecto de invernada es el exterior.
Evitad demasiado calor en invierno, pues una brotación temprana podría arruinar todo el trabajo preparatorio de la floración para el año que viene.
Si nuestro principal interés es conseguir fruto, además de flor, debemos conocer primero unas nociones básicas.
Debemos conocer como lleva a cabo la polinización nuestro Bonsai. Existe una clasificación de conocimientos imprescindibles:
- Planta MONOICA: es aquella con flores unisexuales (flores masculinas y femeninas) situadas sobre el mismo pie de planta.
- Planta HERMAFRODITA: es aquella con flores en las que concurren los dos sexos (estambres y pistilos)
- Planta DIOICA: es aquella con flores unisexuales situadas en distinto pie de planta (con ejemplares macho y hembra)
En teoría dejandolo en el exterior debería haber una polinización natural si tenemos una planta de tipo Monoica o Hermafrodita, en caso de que sea Dioica, precisaremos de dos ejemplares, uno macho y otro hembra y situarlos cerca.
Esta polinización será o bien por medio del aire o bien por medio de insectos que se posan en las flores de nuestro árbol y transportan el polen.
Si de todas formas queremos asegurarnos de que la planta fructificará, podemos fecundarla artificialmente. Bastará con frotar ligera y suavemente los estambres (masculinos) con el pistilo (femenino), y tendremos asegurada la fructificación.
Si te ha parecido interesante y quieres saber más sobre los
ejemplares de bonsai que tengo y como los voy a trabajar no dejes de visitar mi
blog donde ya he publicado algunos de mis futuros trabajos y guías, técnicas y
consejos para ayudarte en esta afición.
Un saludo!
Buen articulo y muy completo compañero.
ResponderEliminarGracias por entrar al blog y por comentar!
ResponderEliminarUn saludo!